viernes, 13 de junio de 2008

LA JUVENTUD

La juventud es pasajera.
Sea consciente de que el tiempo pasa rápido y empiece hoy mismo su trabajo de construir el mañana.
Disfrute su juventud plenamente y aproveche cada segundo de ella, saboreando su sabor de ilusión y esperanza, pero colocando como faro de guía a Dios.
Sepa dividir el tiempo y no descuide su mente y espíritu que serán siempre jóvenes.
No se apegue sólo a los valores materiales, pues también son efímeros.
Viva intensamente, pero siembre el futuro.
Usted cosechará lo que siembre.
fernando ☺☻♥♥♥☻☺

LA FE

SI SE PIERDE LA FE EN SI MISMO
DIFICILMENTE SE VA A PODER
CREER EN LOS DEMAS

"LA CORIDALIDAD"

La cordialidad difícilmente se sucumbe ante los obstáculos. Somos miembros de una cultura en la que la agresión, la mayoría de las veces, obtiene por respuesta otra agresión.

Por eso usted muchas veces gana muy poco sino que suele perder mucho. La mayoría de las personas no cuenta con la habilidad suficiente para entender a la gente, para suponer las razones que hacen que actúe de una u otra forma y mucho menos, con la paciencia y la calma para eliminar la tensión en una situación.

Ante una agresión, cálmese. Ante el maltrato sea cordial. Responder con grosería a una grosería es lastimarse y quedar a la larga mal. Mantener la cordialidad en cualquier situación, así no gane los objetivos que en un momento se ha planteado, siempre dejará su nombre en muy buen lugar.

La cordialidad es la mejor herramienta que existe para que suceda lo que suceda, nunca se hable mal de usted.

Imponga la cordialidad como pauta de comportamiento en su hogar, en su oficina, en su colegio, en su comunidad. Enseñe a sus seres cercanos a manejarla e integrarla dentro de su personalidad.

La gente cordial progresa y vive mejor, vive más feliz. Tratar bien a los demás es tratarse mejor usted mismo y es algo muy sencillo que puede ayudarle a vivir bien.

Si empezamos por ser cordiales estamos dando un paso importante en la ayuda a conseguir la paz.

fernando ☺☻♥♥♥☻☺

CIERRA TUS CIRCULOS

Siempre es preciso saber cuando se acaba una etapa de la vida. Si insistes en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del todo que eres.
Lo importante es ir cerrando círculos, puertas o capítulos, como quieras llamarlos ¿se acabó esa relación?. Puedes pasar mucho tiempo aferrándote a la negación de la realidad, revolcándote en los por qué, insistiendo en regresar el cassete una y otra vez.
Si lo haces el desgaste va a ser infinito, porque en la vida todos y todas estamos encaminados a cerrar capítulos, a darle vuelta a la hoja, a terminar etapas para seguir adelante..
No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué ocurrió lo que ocurrió; hay que soltarlo, hay que desprenderse. No resulta sano ser niños eternos, adolescentes tardíos, empleados de empresas inexistentes. Tampoco forzar vínculos con quien no quiere mantenerlo con nosotros, o bien con quien ya no es conveniente tenerlos. !Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Por eso a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar objetos, cambiar de casa, romper papeles, tirar documentos y vender o regalar libros. Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación. Dejar ir, soltar, desprenderse.
Si andas por la vida dejando puertas abierta (por si acaso), escasamente podrás vivir lo de hoy con satisfacción. ¿Noviazgos o amistades que no clausuraste, para mantener la ilusión de algún día regresar? (¿a que?). Si puedes enfrentar ya la necesidad de aclaraciones y decir las palabras que no dijiste, hazlo. Si no, déjalas ir, cierra capítulos, pero no por orgullo o soberbia, sino porque tú ya no encajas allí, en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio, en esa familia. Mereces crecer, madurar; mereces vencer el miedo a vivir.
Cierra la puerta, dale vuelta a la hoja, concluye el círculo. Aprende a dejar lo que sólo es costumbre, apego improductivo. Clausura, limpia, tira, oxigena, despréndete, sacúdete.
Y recuerda no te engañes, date otra oportunidad, tu vales mucho te lo mereces.
!S U E L T A T E!
“Acepta los riesgos, toda la vida no es sino una oportunidad, el hombre que llega más lejos es, generalmente, el que quiere y se atreve a serlo Dale Carnegie
fernando. ☺☻♥♥♥☻☺

miércoles, 11 de junio de 2008

SUPERANDO EL ERROR DEL CAMINO AL EXITO

Superando el error en camino al éxito




Sabemos que el fracaso ocasional y temporal es posible y es importante no perder demasiado tiempo ni energías cuando se presenta, es conveniente invertirlo más en analizar como revertir la situación y seguir adelante. Si lo muerde una serpiente no la persiga, utilice su energía para buscar el remedio y analizar como evitar que suceda de nuevo antes de emprender nuevamente la marcha, si la persigue luego de la mordedura solo logrará que el veneno avance más rápido por su cuerpo. Invierta su tiempo en hacerse de la vacuna que le impedirá dicho contratiempo en el futuro.

No debemos desanimarnos en esos momentos en que las cosas no suceden como esperamos, tendremos aciertos y errores, todos los tienen, el secreto esta en saber sobreponerse y continuar sin detener el movimiento, es lo que hacen los que logran sus objetivos, el resto, ante la falla se detienen y se desaniman, abandonando y deteniendo su marcha. Los errores y equivocaciones son inevitables, quien no los tiene, pero la elección correcta es extraer una enseñanza de ella y continuar sin perder mucho más tiempo, y con un nuevo conocimiento en su poder.

Es importante estar preparados para ambos momentos, para los momentos de acierto y para los de error, momentos que todos tenemos pero que saben capitalizar quienes triunfan, esa es la diferencia, aprender y continuar o detener la marcha y culparnos sintiendo que no somos capaces son nuestras alternativas, la vida tiene todo tipo de situaciones, el saber como vivirlas marca una gran diferencia. Ante la crisis y el error nos sentimos mal y detenemos la marcha, pero no mucho más de lo necesario y de lo que la situación merece, para luego si continuar nuestro camino.

Escriba las diez dificultades más grandes que tiene actualmente, describa las situaciones y como reacciona a ellas, y como le gustaría reaccionar en el futuro. Tome la decisión de cómo actuará cuando se presente de nuevo, analice que cosas no hizo para superarlas y que puede hacer ahora para ponerse en acción hoy mismo. Si creyó realmente que no podía hacer nada al respecto decida que encontrará las maneras de superar esas dificultades por medio de planes definidos y haciendo todo lo que este a su alcance y en sus posibilidades. Enfóquese en los problemas y analice de que manera los enfrentará para superarlos o aceptará si es que no está a su alcance la solución, al menos por el momento. Póngase en acción y trabaje en ellos hoy mismo.

Una frustración temporal es para la mayoría motivo suficiente para abandonar y desistir, triunfan quienes saben que tendrán obstáculos que su firme determinación y deseo de alcanzar el objetivo los empujarán para superar y avanzar a pesar de ellos. Use su frustración como el combustible que alimentará su nuevo proyecto de vida.

En más de una oportunidad le debe haber sucedido el saber que si avanzaba un poco más y se mantenía firme en su camino con perseverancia y determinación habría logrado alcanzar ese objetivo que tenía en mente. Objetivos que se le escaparon por desistir ante el primer obstáculo o señal de fracaso, solo hacia falta perseverar un poco más y lo habría logrado. Quizás fue un error dar un paso al costado pero es una experiencia que debe reconocer, analizar y capitalizar a fin de no repetirla en el futuro.

Una cosa es quejarse de la actual situación y quedarse de brazos cruzados y otra muy diferente es decidir que se va a cambiar la misma y comenzar a la brevedad con lo que este al alcance. Ya no hay excusas para culpar por lo que nos sucede a algo ahí afuera, somos nosotros los responsables y debemos si lo queremos así, cambiar las cosas a como las queremos. Renunciar es lo que hacen la mayoría de las personas, no lo haga a menos que haya objetivamente suficientes razones válidas como para desistir.

Lo importante no esta allá afuera sino en su interior, allí encontrará lo que necesita para ser capaz de revertir o modificar las cosas, usted decide como debe ser, no una circunstancia externa, solo la debilidad de carácter permite claudicar ante circunstancias externas. Cree que quienes llegaron a ser millonarios tuvieron todo al alcance de la mano?, de ninguna manera fue así, ellos decidieron como iban a ser las cosas y tomaron las riendas del asunto. Quienes han logrado grandes objetivos han pasado por las mismas dificultades o peores que las suyas, el secreto esta en saber superarlas, del otro lado esta el éxito esperándolo.

En cada situación adversa, infortunio u obstáculo hay un beneficio igual o superior por descubrir. Cada dificultad que encuentre puede ser una motivación extra para ser aprovechada y lograr sus objetivos, una fuerza que lo empuje hacia su logro. A medida que recorra su camino y supere obstáculos y dificultades templará su carácter y fortalecerá su personalidad, tal y como se fortalece un músculo con el ejercicio continuo. El verdadero éxito no llega para aquellas personas débiles de carácter y personalidad.

Viene bien de tanto en tanto detenernos y detallar todo aquello que poseemos y tenemos en nuestras vidas, si hacemos un inventario de todo ello encontraremos que disponemos de recursos que muchos otros desearían también poseer, sólo hemos perdido temporalmente de vista todos los recursos con los que contamos y que la vida nos ha regalado, están ahí y damos por sentado que es así, reconocerlos y valorarlos nos ayudará en nuestro camino. Su familia, su salud, piense en todo lo que tiene y siga adelante, no pierda más tiempo lamentándose, todos tenemos problemas, no son exclusividad de nadie, no se vea a si mismo como el blanco de una maldición que no existe. Es fundamental valorar y concentrarnos en las cosas que andan bien, superar el error y avanzar sin deternernos en ello más de lo necesario. Vea los fracasos y errores como pequeñas nubes negras en un inmenso cielo azul, que los mismos no le impidan tener una perspectiva real de las cosas.

fernando - tomado del libro dinero, exito y prosperidad

EL MEJOR CONDUCTOR

En un país austral de América es costumbre que los habitantes de las regiones campestres, viajen a caballo desde sus tierras hasta el pueblo más cercano para abastecerse de los elementos necesarios para vivir y mantenerse. Se dedican principalmente a trabajar la tierra y a cuidar sus animales.

Pues bien, en una ocasión, Ño Peiro ensilló al Carmelo, un alazán algo desgarbado por los años, pero un fiel compañero de su amo. Ya montado se dirigió al pueblo más cercano a buscar algo de azúcar y hierba mate que le estaba escaseando. Las noches de otoño ya se estaban poniendo algo heladas.

Y como siempre ocurre, en el pueblo todos se conocen y como Ño Peiro era muy querido, no faltó un parroquiano que lo invitó a la cantina de Misiá Clementina a degustar las famosas “caldúas” y un reponedor “causeo” de patas; todo esto bien regado con el mejor “chacolí” de la cosecha del futre don Juan Carlos Ochagavía.

Demás está decir que las horas fueron pasando, como suele suceder cuando se está disfrutando, rápidamente y la noche cayó sobre el pueblo. Ño Peiro, ya bien coloradito por los innumerables brindis, se retiró yendo a su caballo que, dócilmente lo esperaba. Su amigo le había regalado una botella del mejor aguardiente de la zona, “para que tomara matecito con punta” le había dicho.

Montó a duras penas y enfiló hacia la querencia. En el camino y bajo los vapores etílicos empezó a dormirse sobre la montura. El fiel caballo, continuaba su paso cansino hacia la querencia, camino recorrido mil veces. La oscuridad cada vez era más profunda. De repente, una piedra hizo que la cabalgadura tropezara y Ño Peiro, se fuera de bruces al suelo, despertando bruscamente. Ya en el suelo y entre la oscuridad empieza a tantear a su alrededor tocando un líquido algo viscoso. Su preocupación se habría notado en su rostro si hubiese habido luz. Con gran recelo llevó sus dedos mojados en el líquido hacia su boca probándolo y grande fue la expresión de alegría a la vez que decía: “gracias a Dios es sangre”.

MORALEJA

Integridad. Cuidado a lo que damos importancia.Este hombre, estaba más preocupado de su carga que su propia integridad. Prefería que ese líquido fuese sangre suya y no el preciado licor que le habían regalado. ¡Cuántas veces vemos en el tráfago diario a conductores de vehículos que sin respeto hacia sus pasajeros ejecutan maniobras riesgosas y pelean con otros conductores quien pasa primero!

Todos los que conducimos vehículos y llevamos personas de pasajeros debiéramos ser como Ño Peiro. Preocupados más por nuestra preciada carga y a costa de nuestra propia integridad.

FERNANDO. ☺☻♥♥♥☻☺